Ando estresada, pero ando recta. Y mira que bien.
Me di cuenta de que debía estresarme el jueves pasado haciendo el trabajo de product placement con Aina. Bueno lo pensamos las dos como siempre nos pasa, agobiándonos mutuamente y poniéndonos objetivos que nunca cumplimos. Y será así hasta que terminemos esta carrera tan cómoda. La cosa es que lo pensamos mientras caminábamos hacia el cine como dos perras, después de haber escrito cuatro lineas por hora. «Los edukadores». Y después de la peli una sensación de felicidad, de querer enamorarte y cambiar el mundo… luego piensas que si lo primero ya es difícil, lo segundo se lo dejo a alguien que sea mejor persona que yo y que no ande mirándose el ombligo continuamente. Pero por unas horas te sientes bien porque como dice mi amiga «es una película de gente buena». Supongo que «Soñadores» es mucho mejor, pero no te hace sentir así. Es esta, y no otra, la perfecta para que la viésemos juntas.
Ese mismo dia por la noche vi «Tommy» con dolor de tripa. Todo por culpa de mi erasmusita, que me hizo una cata de salchichas austríacas. De esas que toman ellos entre lagos y montañas. Y yo me las como, no están mal pero al cabo de un rato me tomo una manzanilla. A mi lado, mientras, la amiga Lina (también erasmus) que me dice con ese acento basto de alemana bien comida «este salami está de puta madre», y pienso ¿no le vomitaré yo a esta tia encima? Esther se queja al vecino moderno de que el DVD no tiene subtítulos y él, que es más bilingüe que nosotras, le dice «ah… es que no controlais el inglés?». Querido, yo quiero ver un musical CON SUBTÍTULOS a ser posible.
Pero bueno, no me indigno porque la cámara me quiere. Me hicieron una entrevista sobre «la llengua i tot això» y yo ahí to bonica con mi valenciano del «grau menjat» (jojo), defendiendo una televisión en catalán y esas cosas que hay que defender. El viernes fue un caso distinto. Paula, Erasmus-amiga y yo comimos fritanga en un típico bar de abuelos (donde hay grasa, obras y te tratan mal) y tomamos café en un local italiano que más bien parecía el zoco. Fue bastante gracioso entrar y verte un ambiente totalmente distinto al que te esperas que haya. Era un típico café italiano lleno de marroquís. Y claro, está al lado de la oficina de inmigración o algo parecido, donde la gente espera millones de horas para conseguir la residencia que Zapatito les prometió. Me dejó de parecer gracioso al quedarme mirando a un hombre con arrugas, ya mayor… a esa edad y depender de un puto papel. Es lo que toca pero es triste igual. Mira que picajosa estoy, pero si yo soy una chica superficial (¿tu crees?). Pues todavía queda lo peor. Mira mira la cola que hay en el Corte Inglés, todas abuelas con cardados imposibles y pachuli del caro. ¿Acaso es Saramago? ¿Acaso es Bisbal? No… acaso es un líder de masas bajito y con bigote, acaso es un ex presidente enano, acaso es Jose María Aznar y acaso son Rita la alcaldesa y Camps el vampiro . Y nosotras entre niñas de colegio, hombres con corbata, gomina y gemelos, entre las susodichas abuelas y su pachuli… y la erasmus aplaude al ritmo de «presidente, presidente» y yo le recrimino «no aplaudas, que tu no sabes a quién estas aplaudiendo», Paula y yo sonrojadas, rojas como un tomate. Intentamos llamar a Laura (FlyGiar) para que pueda insultarle en directo porque ella se indigna mucho con todo lo que quede a mano derecha, así descarga adrenalina. No lo coje, vámonos que coño hacemos aquí sino… una cámara de TVE1 se vuelve hacia nosotras. Me agacho entre las piernas de la marabunta y obligo a Paula a hacer lo mismo. A Pio Cabanillas lo grabaron santiguándose ante la tumba de Franco… ¿no sabes que NO debemos salir por la tele ASI? Hoy en El Club he visto que una tía le gritó a pleno pulmón eso de «viva el matrimonio gay», jo Paula ¿por qué nos vamos cuando viene lo mejor, cuendo podemos alzar la cabeza dignamente sin ponernos rojas? Uy jajaj esto ha quedado rollo «mujer contra mujer» jojo que no, que a mi tus pechos me gustan ya lo sabes pero por ahora me siguen poniendo los nenes (y la Colazzi) y a ti te sigue poniendo Juanma.
Bueno, como mi amiguito Ernesto me dedica fotos bonitas y yo nunca le digo nada en plan «te quiero, te echaré de menos, no te vayas Er, no te vayas de aquí, adiós Er, pensaré mucho en tí» (yo esas cosas, o directamente no las digo, o utilizo otra vía más tradicional y romántica), le voy a dedicar un refrán que, vale, es feo, pero ahora te lo explico:
Per la lluna plena de maig / A buscar llagostins me’n vaig / Diuen que en les nits de lluna plena els llagostins són més plens i més gustosos / La lluna plena és la millor nit per pescar llagostins.
Si pones Canal 9 y me ves recitando ese refrán con cara de gilipollas que sepas que te lo dediqué. Sí… la chica que te culturiza se ha visto hoy en una clase con fondo marino detrás de ella y delante de una cámara de Canal 9, con un periodista que le decía «así, venga otra vez… pero más simpática… no te pongas nerviosa, otra vez… más simpática» recitando ESO. Y lo ha hecho aún a sabiendas que luego saldría por la tele. Joder, y no estaba nerviosa, solo es que una no puede decir ESO y no sentirse ridiiiicula. Pero mira lo bien que me lo paso. Y por eso te lo dedico, porque tu también lo hubieses hecho… o me hubieses apoyado moralmente jajaj.
El viernes salí. Noche de chicas, me gustó darme cuenta de que todas pensamos igual pero actuamos distinto. Muy borracha con el nuevo vodka «Kebap» (se acabó el Royal Swan… se acabó toda una época)
P.D. Y eso, que ultimamente veo a la gente rara. Que Alberto me llama perra y me dice que le pone el sadomaso para, seguidamente, pegarme en la cara con una regla. Que Ana me regala bolsas con libretas, llaveros, bolis… y una gorra de la Universidad Católica (jaja, gracias nena… aunque cada vez me das más miedo, cuidadin con el mundo submarino que no sabes con lo q te puedes topar por las profundidades jojo)